lunes, 29 de diciembre de 2008

El euskera y la OPE de Osakidetza


Publicado en DEIA


En mi triple condición de trabajador de Osakidetza, Médico de Familia y Secretario General de la Unión de Médicos de Atención Primaria de Euskadi-Euskal Herriko Lehen Mailako Atentzioaren Sendagileren Elkartea (UMAP-LMASE); me gustaría realizar algunas precisiones en torno a las afirmaciones de la parlamentaria Eider Mendoza, en el debate sobre el Euskera y la OPE de Osakidetza que tuvo lugar ayer en el Parlamento Vasco. Parto como premisa básica e irrenunciable del acuerdo sin reservas en torno a la euskaldunización no ya sólo de Osakidetza sino de la sociedad vasca en su conjunto; pero discrepo de la forma en que este proceso se está llevando a cabo. Decía en su intervención la mencionada parlamentaria que "para ser propietario de una plaza en Osakidetza hay que tener buenos resultados en los exámenes de acceso, una amplia experiencia y buena formación"; para señalar posteriormente que "una vez superada esta primera fase, entre los mejores profesionales el conocimiento del euskera es decisivo, pero siempre entre los mejores profesionales que han superado la fase de los exámenes". De la lectura de esas afirmaciones parece deducirse que el Euskera viene a ser un factor decisivo en casos de igualdad. También parece deducirse que el proceso consta de una primera fase: Examen + Experiencia + Formación, y que después vendría a incorporarse el Euskera que se convertiría en el factor que dirimiría el empate. La realidad como bien sabe o debiera saber la Sra. Mendoza no es así. Una vez realizado el examen los demás apartados: experiencia profesional, formación y Euskera se suman al unísono y se obtiene la puntuación total. Como bien sabe la Sra. Mendoza la posesión del PL-2 de Euskera supuso 16 puntos en la OPE de 2006; 17 puntos en la próxima OPE de 2008 y la posesión del PL-1 supuso 8 puntos en la OPE de 2006 y supondrá 8,5 puntos en la OPE de 2008. Un sencillísimo cálculo matemático nos permite observar que un opositor con 85 puntos en el examen y poseedor del PL-2 (16 puntos) superaría a un opositor con 100 puntos (máxima puntuación posible) en el examen. ¿Han hecho los dos un examen similar? Evidentemente no. En el apartado formación la puntuación máxima obtenible es de 20 puntos. Otro sencillísmo cálculo nos permite observar cómo un opositor con los 16 puntos del PL-2 y 5 puntos en el apartado formación superaría a un opositor con 20 puntos (puntuación máxima posible) en el apartado formación. ¿Tienen ambos opositores una formación similar? Evidentemente no. Al hilo de esta cuestión relativa a la formación mencionaré que la posesión del Titulo de Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria se valora en 13 puntos, es decir, la posesión del Titulo de especialista específico en el ámbito de la Atención Primaria vale menos que uno de los méritos (no olvidemos que el euskera es un requisito en las plazas con perfil linguístico pero no es sino un mérito en las demás). Concluyamos con el apartado relativo a la experiencia profesional. Por cada mes de experiencia se puntuó 0,18 puntos en la OPE de 2006, lo cual supone 2,16 puntos por año de servicios prestados. Nuevamente un sencillo cálculo nos permite observar que un opositor en posesión del PL-2 y 4 años de experiencia profesional superaría a un opositor sin perfil linguístico y 10 años de experiencia profesional. ¿Tienen ambos opositores una experiencia profesional equiparable? Nuevamente y rotundamente no. La realidad objetiva es la señalada pero no es la más grave en lo relativo al Euskera y la OPE de Osakidetza. Lo más grave es que en función del planteamiento de perfilación a priori que lleva a cabo Osakidetza; convoca unas plazas ya perfiladas y otras sin perfil, en lugar de convocarlas sin perfil y una vez adjudicadas perfilar aquellas que estime oportuno. Llevado el proceso de la forma señalada, y no de la forma en que es llevado a cabo por parte de Osakidetza, todo opositor que se hubiera ganado la plaza la haría efectiva. Como quiera que Osakidetza realiza la convocatoria estableciendo ya de antemano unas plazas perfiladas y otras sin perfil y como además no obliga a que aquellos opositores con derecho a plaza y que posean el perfil linguístico a elegir una plaza perfilada; puede darse el caso de que ese opositor que se ha ganado el derecho a una plaza, y se lo ha ganado a pesar de tener 0 puntos en la casilla del euskera se quede sin plaza. Sí, sin plaza ya que los opositores con perfil linguistico no obligados a elegir plaza perfilada pueden optar por una no perfilada de modo y manera que el opositor sin perfil se encuentra con el hecho de que sólo le queden para elegir plazas perfiladas. Se escenifica de ese modo una situación en la cual los opositores con perfil opositan por las plazas perfiladas y las no perfiladas y los opositores sin perfil sólo por las no perfiladas; situación en la que los principios de igualdad, capacidad y mérito quedan cuando menos en situación de entredicho. Todo el proceso puede llevarse a cabo, existen fórmulas, de modo que el proceso de euskaldunización de Osakidetza no se resienta en absoluto, y que todo aquel que ha obtenido derecho a plaza la obtenga efectivamente o puede hacerse mal, como lo está haciendo Osakidetza y propiciar que pueda darse esa suprema injusticia de que un opositor con plaza se quede sin ella. Puede hacerse desde un diálogo honesto dirigido a aunar todos los factores y encaminado a que impere la justicia y no sólo la legalidad. Obviamente la OPE de Osakidetza, la valoración en ella del Euskera, etc., tienen un legítimo soporte legal y reglamentario, pero permítaseme señalar que en ocasiones legalidad no es sinónimo de justicia y una aplicación normativa que potencialmente puede resultar excluyente no es jamás justa.


Felipe Diez Blanco


Secretario General de la UMAP-LMASE

3 comentarios:

Anónimo dijo...

A mi me parece que os tomais muy mal lo del euskera. Yo también hago oposiciones para osakidetza y si en las bases pone que tengo que tener oque se van a valorar ciertas cosas, informática, cursos varios, pues me tomo la molestia, o no, de currarme esos temas, el euskera entre ellos.
De acuerdo que cuesta, es dificil,hay que dedicarle tiempo, pero cada uno de nosotros tenemos que acerlo, cada uno en su nivel, hay que asumirlo. No entiendo porque le poneis tantas pegas cuando se trata del ueskera. Yo soy euskaldun y te aseguro que hace años que no tengo un médico capaz de atenderme en euskera, osea que no será para tanto. Las nuevas generaciones vienen más preparadas por lo que hay que arrear majete. No tengais tanta animadversión hacia un idioma ancestral, tenedle un respeto y aprended a disfrutar de él no ha sufrirlo. Animo

Carlos B. dijo...

Yo no tengo animadversión pero entiendo a la gente que lo tiene, fruto de la imposición que no permite disfrutarlo . La valoración del euskera en las oposiciones es desproporcionada. De todas formas con lo que escasean los médicos de familia fruto de muchos años de ninguneo como no arreen médicos cubanos, rumanos y ecuatorianos... Para opositar en osakidetza parece que no conoces la situación de la medicina de familia.

Anónimo dijo...

Soy Auxiliar de Enfermería, con varios años trabajados y cierta edad, y es muy duro que como en la última OPE-2008, que con batería de preguntas muchas sacamas 100 de 100, pues venga una niña como mi hija, con el euskera debajo del brazo y se ponga por delante mio en puntuación.
¿Sabes lo duro que es estudiar día a día, 2 horas, lo costoso económicamente? para luego ser yo de las pocas que lo habla con el usuario...
Creo que la puntuación del euskera y la exigencia "gramatical", está sobrevalorada.
Mira, yo, en la OPE del 2002 y 2004, me presenté siempre a las pruebas que entonces, realizaba Osakidetza en Vitoria para valorar nuestros conocimientos de euskera.
Obtuve una puntuación de 8. Que creí que se mantendrían.
¡pues no! fueron los sindicatos abertzales quienes firmaron un acuerdo para exigir los "perfiles" y nos quitaron de un plumazo la puntuación que ya teníamos.
En mi opinión, el nivel de perfiles es una exigencia muy alta, y nos deberían valorar nuestro conocimiento de la lengua a nivel coloquial.
Igual que cualquiera que haya estudiado la carrera en España y ejerce en Inglaterra, comienza con sus conocimientos linguisticos básicos y de comunicación verbal, pero no le exigen titulación alguna.