Ahora que voy a ser padre con 37 años , mi admirado Dr. Gervás me recuerda que soy un proletario.
Publicado en acta sanitaria:
"....La imagen clásica del rico todavía domina en los chistes de 'El Jueves', por ejemplo. Es el gordo con papada y puro que viste elegantemente, con chistera. Pero de eso hay poco en la realidad. Es, de hecho, una imagen del siglo XIX y de principios del siglo XX, cuando ser rico equivalía a comer y a tener abrigo, a poder fumar y a vestirse bien. En la actualidad, la gente verdaderamente rica tiene otras actitudes y vive otras formas de vida. El rico de verdad tiene una dentadura perfecta (cuida la salud dental), está delgado (rechaza la gordura por insana y antiestética), no fuma (atribuye el vicio de fumar a la clase baja), no bebe vino ni licores (o bebe en pequeña cantidad y de excelente calidad, pues se lo puede permitir, y también atribuye el alcoholismo a la clase baja), bebe agua del grifo (sabe que el agua embotellada es menos higiénica y poco "ecológica"), no tiene teléfono móvil (otros se preocupan por él de las cosas urgentes y de los contactos), viste informalmente (excelente calidad pero no llamativa ni "de marcas") y tiene hijos y nietos. Sí, el rico de verdad es el que se puede permitir el lujo de tener hijos a edades tempranas y el que tiene hijos que también se pueden permitir el lujo de reproducirse prontamente, con lo que el rico-rico se reúne con una prole de hijos y nietos, como el antiguo proletario.El actual proletario cree que es una señal de libertad el no tener hijos (ni nietos, consiguientemente), o como mucho tener un hijo a los treinta y cinco o cuarenta años (un "hijo póstumo") y ser abuelo "único" en la senectud. El actual proletario ni siquiera piensa en constituir una familia hasta bien entrada la vida de adulto maduro....."
lunes, 11 de enero de 2010
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1 comentario:
Enhorabuena, Carlos. Un nuevo hincha del Athletic que alegrará tus noches en vela. ¿O las provocará? Ya no me acuerdo.
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